Mediación familiar

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Hoy te traigo en esta publicación sobre mediación familiar en la que vamos a visibilizar cómo te puede ayudar. Considero que es un recurso social y profesional que puedes emplear cuándo se produzca algún tipo de conflicto dentro de tu ámbito familiar.

Primeramente, debemos de saber qué entendemos por familia y cómo está estructurada. La familia la forman uno o varios miembros en los que se producen relaciones entre ellos. Ahora bien, aquí es donde interviene la mediación familiar. En las relaciones al producirse conflictos entre los miembros. Nos da la posibilidad de cuidar y de hacer fortalecer la relación por el bien de todos y por que creemos en la relación sana y estable con esa persona.

Existen momentos dentro del ciclo vital por los que viven la familia en los que se producen momentos más susceptibles de crisis. Suele coincidir con transiciones de etapas, de unos ciclos vitales a otros. Es por eso, que el ejemplo que dimos en el directo de Instagram estuvo relacionado con los conflictos surgidos en entre (m)padres y adolescentes.

Es muy importante entender a la familia como un todo. Como un sistema en el que cada vez que le suceda algo a un miembro de la familia, le afecta de manera transversal al resto de los miembros.

Las situaciones conflictivas que se pueden dar dentro del ámbito familiar:

  • Conflictos intergeneracionales entre padres-hijos producido por su estilo educativo.
  • Conflictos en adopciones. Búsqueda de la familia de origen.
  • Empresas familiares.
  • Herencias
  • Convivencia en familias ensambladas
  • Hermanos adultos que tienes personas mayores a cargo para cuidados.

¿Qué le puede aportar a la persona este proceso de  mediación?

Creo que proporcionar un espacio de comunicación en el que podamos entender el conflicto como una forma de crear nuevas oportunidades para aprender, crecer y avanzar. Los conflictos se dan mientras existen relaciones entre personas. Se deben de buscar otros espacios para dar relevancia a nuestra forma de comunicación y cómo llevamos las relaciones. Es decir, a darnos la opción a replantearnos que estamos haciendo para que el conflicto siga y nuestra relación se quebrante. Es un proceso que tiene en cuenta las emociones que suscitan entre las personas que inician este proceso. Es querer apostar por vuestra relación desde la responsabilidad de cada uno.

Creo que al igual que los problemas, los conflictos son oportunidades maravillosas para aprender otra forma de hacer. Si lo vemos desde este enfoque en positivo para aprender de los aprendizajes que la vida nos quiere enseñar.

La mediación es un proceso neutral en la que el mediador no se posiciona ante las partes, sino que solo facilita. Es un proceso confidencial e incluso entre las partes a no ser que expresen lo contrario en alguna parte de la mediación. Su acceso puede ser desde un proceso judicial o extrajudicial. Por ejemplo, en los cosas comentados en el directo, nos referimos a la parte intrajudicial.

Los principios de la mediación son:

La flexibilidad, la imparcialidad, la igualdad y la neutralidad, Que el equilibrio entre las partes sea real y efectivo. Además, de la confidencialidad en todo el proceso. Al ser las personas las que sean ellas las que lleguen a acuerdos, se confía en la buena fe y en el acuerdo entre ambos.  Debe de ser un proceso completamente voluntario.

Entonces afirmamos que el mediador simplemente es un profesional experto en comunicación que se muestra neutral e imparcial y que solo facilita la comunicación y los acuerdos.

A mí me gusta mencionar a Sara Cobb pues tiene un modelo de mediación sistémico y bien completo. Ella considera a la persona mediadora como un promotor, un facilitador y un forjador de acuerdos. Desde esta perspectiva, vemos al conflicto desde la racionalidad, la comprensión y la colaboración. El mediador no es el protagonista, solo es un profesional que facilita con herramientas en comunicación. Es un recurso como un vehículo de cambio personal y social.

Es por eso que las características de la mediación son que se trata de un proceso cooperativo, comunicativo, rápida, económica y eficaz, además de dar una  concepción positiva del conflicto.  Trata de distanciar a la persona del conflicto ocasionado. La persona es quién tiene la capacidad de resolver y buscar soluciones. Es decir, externalizamos la persona del problema.

Hay casos diferentes en los que los menores están en el medio del conflicto. Según el tipo de conflicto, y lo que opine el mediador a que intervengan o no, dependerá de que sea partícipe en la mediación o no. O quizás en una parte del proceso de la medicación. También depende de la edad del niño y la niña, claro.

Pues estamos ante un recurso cuya regulación en legislación en mediación familiar está algo descentralizada. Las Comunidades Autónomas que cuentan con este tipo de legislación son: Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Navarra, País Vasco, Galicia, Asturias. Aunque si hay una ley reguladora del 2012, proveniente de una Directiva de la Unión Europea. Es un recurso bastante nuevo y que sí necesita ser más visibilizado por el gran aporte y valor que da en la convivencia social.

Acercarte la mediación familiar es para que sepas que en esto de educar o de relacionarte con tu familia no estás sola. Hay avances. Hay progreso y nuevas técnicas y profesionales que te podemos acompañar y enseñar en resolver tus conflictos. Yo solo te pido, ahora que me lees, que si crees que tienes algún tipo de conflicto, no lo dejes pasar. De esa forma no se soluciona. De esta forma, el implicarte tú en el cambio, sí. Tu compromiso y tu forma de dar sí que hacen por solucionarlo.

Puedes buscar recursos cerca de tu comunidad pues quizás te topes con algún centro de mediación o persona mediadora autónoma que te puede acompañar en el proceso de resolver tu conflicto.

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